domingo, 22 de marzo de 2009

THE WOMAN OF THE ONE THOUSAND CALLS


"...Es cierto,...puede que fueran mil llamadas...no lo se...el caso es que ella no dejó de llamarlo por teléfono y las horas pasaron fugaces ante su mirada, absorta en la contemplación de la incompetencia. Y, sí, puede que fueran mil llamadas...Lo llamó muchas veces, sí, lo llamó hasta el cansancio, hasta agotar las baterías de todos los teléfonos disponibles y a su alcance...Lo llamó con pasión, con desesperación, lo llamó con locura, lo llamó conteniendo unas ganas irrefrenables de llorar cada segundo que pasaba...Fue entonces cuando comenzó a sentir ese nudo en la boca del estómago que solamente desaparecerá el día del reencuentro..."


Mariposita

....QUIERO EMPEZAR A LLORAR Y NO PARAR....



Quiero empezar a llorar y nunca parar hasta que llene de nuevo el Lago Texcoco...

y el nivel de sus aguas se restablezca, y el lago vuelva a ser lo que fue en sus primitivos orígenes...

Quiero empezar a llorar y que nadie me interumpa...

Quiero llorar hasta que la marea suba...

Quiero empezar a llorar y no parar hasta que el águila sobre el nopal me escuche...

Hasta que el canto del colibrí pare y el sol se oculte...

Quiero empezar a llorar y no parar...





Mariposita